Muchos piensan que mi mundo se ha reducido al tamaño de
ustedes, mis adorados nietos, lo que ellos ignoran es que mi mundo se ha
ampliado porque ustedes me han permitido explorar lugares de mi misma que
desconocía, algunos con sus respectivas sombras, estoy viviendo lo más parecido
a una luna de miel abueluna, a diferencia de la luna de miel matrimonial, está
ha durado mucho, su intensidad permanece intacta y el encantamiento del que soy
presa por ustedes es una cosa sobrenatural. A veces me sorprendo paralizada por
el movimiento de sus manos, por la textura de vuestras pieles, o por el brillo
de vuestros ojos y me parece estar en una dimensión desconocida. Como ya he
perdido algo la visión de cerca, me gusta ponerme mis lentes de leer para
observar vuestras facciones y memorizar esos rostros que tanto adoro y que el
universo-Dios a través de mi hija dibujó
y materializó con el único objetivo de hacerme la mujer más dichosa del
planeta.
A veces me pongo muy triste cuando me doy cuenta que no los
conoceré cuando tengan mi edad, quizá por eso disfruto tan intensamente su
existencia, ser testigo de las diferentes formas que va adoptando vuestros
cuerpos y como se han ido transformando en seres cada día más independientes,
como capturan el mundo en sus sentidos y lo traducen a su singular manera,
hasta me regalan nuevas formas de ver la vida desde esa perspectiva tan
singular que ustedes tienen.
Ignoro si existe una abuela más enloquecida con este rol de
lo que yo lo estoy, seguramente que si, celebro que así sea porque esta es otra
esfera de la felicidad a la que muchas mujeres renuncian porque se sienten
cansadas de educar a sus hijos y ya no quieren ejercer más la maternidad,
porque educarlos a ustedes es volver a ser madre, es tener que desempacar
muchas destrezas guardadas e incluso perfeccionarlas para hacer esta labor que
en estos tiempos muy pocos quieren hacer.
Ustedes ya están en una escuela, a mi no me gustan las
escuelas, pero respeto el hecho de que ustedes tendrán que ir a una, aunque
nada me gustaría más que educarlos en casa...la primera vez que fui a la
escuela de Thomas, mi alma quedó partida en pedacitos, ese lugar parecía más
una prisión que una escuela, el tiempo que tienen para jugar, brincar,
ensuciarse de tierra y ser simplemente niños está reducido a media hora, que inclemencia
Dios mío, todo en nombre de la seguridad de los educadores, sin importar si se
está sacrificando el desarrollo motor de ustedes y la felicidad. Además, la
profesora de Tomasito es sombría, físicamente nada agraciada, y luce tan triste
y aburrida que sus alumnos han adquirido esa misma expresión. El día que le
celebré el cumpleaños a Thomas en la escuela, ni se escuchaba el happy
birthday, daba tristeza, la más alegre del salón era yo, una alegre solitaria,
a la que todos los niños me miraban como si se fueran a poner a llorar, recogí
las cosas y lloré mientras me oculté de la vista de Berta mi amiga y de la
profesora, no quería que supieran que estaba llorando. Cuando tengo que dejar a Tomasito en ese lugar,
salgo con el corazón apretadito de dolor. La profesora de Samanta en cambio es
alegre, les enseñó a bailar, el día que celebramos el cumpleaños de ella,
bailaron una coreografía y todo fue tan diferente! no obstante las escuelas son
cárceles, así la sociedad no lo admita, toda libertad es coartada, cuando
crezcan hasta la libertad de pensar les será coartada.
Samantha, en tus 5 años, tu padre preparó una gran fiesta con
parrillada argentina y te dio un show de Frozen, te emocionaste mucho cuando el
show llegó mientras yo que podía sentir la misma emoción que tenías, lidié con
el llanto apretado en mi garganta y con las lágrimas que salían sin pedir
permiso y tomaba fotos y vídeo.
A la siguiente semana te llevamos de crucero a las Bahamas,
siempre habías dicho que querías ir en barco, ese fue mi regalo de cumpleaños,
tu pasaje, tu mami pago el de Thomas y el de ella, para que pudiéramos ir todos
juntos, aunque luego pensé que hubiera sido mejor idea ir solas tu y yo, Thomas
todavía es muy dramático y consigue arruinar buenos momentos.
Thomas, me estas enseñando a ejercitar la paciencia, tu
carácter es fuerte, eres muy caprichoso, cuando no se te da lo que pides tiras
todo lejos y golpeas lo que haya en tu camino, así seamos tu madre, tu hermana
o yo, te vuelves obsesivo con algunas cosas y eres capaz de repetir la misma
frase pidiendo algo hasta por 45 minutos, lo cual resulta desgastante y sobre
todo muy incómodo, tu madre debe lidiar con esto a diario mientras conduce a tu
colegio, siempre encuentras un buen pretexto para hacer un berrinche en el
auto, lo que no deja de ser peligroso para la seguridad de ustedes. Estamos considerando
esto una etapa y haciendo lo mejor que podemos para que superes este episodio.
En este momento estas obsesionado por los lápices de labios de mujer y los
esmaltes de uñas, lo que pone muy nerviosa a la gente, sobre todo a tu padre,
yo lo veo como una etapa que no debemos inhibir porque eso puede reforzar tu
interés por esos objetos, mira por ejemplo en este momento ya te está pasando
la obsesión por el color morado, ya puedes comer con cubiertos de otro color,
antes solo podían ser morados.
Samantha, estas en una etapa maravillosa, eres muy
madura, brillante y aprendes con una
rapidez asombrosa y ya te gusta colaborar con las labores domésticas, disfrutas
jugar sola, te encanta disfrazarte como a mi, y te gusta pintar y bailar, eres
como una cajita de música en la casa. Pronto serán las vacaciones de spring
brake y entre los planes que tienes esta aprender a lavar los platos, que
emocionante!.
