lunes, 28 de abril de 2014

EDUCARAMANDO

A menudo las personas que me visitan cuando estoy con mis nietos se sorprenden de algunos hábitos que ellos tienen, porque les parecen inusuales, como que humedezcan la tocineta en el chocolate para comérsela, que metan en el chocolate las galletas, los cereales y algunas cosas que su imaginación les dicta, que a mi nieto le guste peinar muñecas y que su color favorito sea el morado. El instinto de mis visitantes es corregir a mis nietos, los más respetuosos me hacen énfasis en que debo corregirles sus hábitos y enseñarles los adecuados, pero ¿Qué es lo adecuado para un niño que está descubriendo el mundo?

Me gusta que ellos descubran por ellos mismos las mezclas de sabores incluso si no fueran de mi gusto, que prueben diferentes posibilidades, que se apasionen con un color, un sabor determinado hasta que esa pasión sea reemplazada por una nueva que ellos mismos descubran. En otras palabras no quiero invadirles su vida con mis creencias ni con mis limitaciones ¿Quién me dice que los helados con cebolla no saben deliciosos? la verdad nunca los he probado por eso no puedo saber si me gustan o no, es más nunca me he dado la oportunidad de probarlos porque cuando era niña alguien me enseñó a temer a la mezcla de la cebolla con el helado, y quién sabe, a lo mejor me estoy perdiendo de mucho y no lo sé.

También les permito que saquen todos los juguetes si eso los hace felices que los mezclen, que desbaraten muñecas y les pongan las patas de los gatos y de los perros y construyan personajes mitológicos para sus películas imaginarias. Mientras los observo jugando me doy cuenta que son libretistas, directores, actores, escenógrafos, productores y hasta espectadores de sus propias obras, se fusionan con su actividad y se meten en diferentes personajes, la imaginación de los niños es envidiable y es un mundo tan grande que quizá por eso los adultos no podemos accederlo.

En los últimos tiempos de mi vida he pasado más tiempo desarticulando creencias que tenía y que no han sido funcionales en mi vida que pasándola bien con las creencias que tenía, he encontrado más placer y felicidad en mis nuevas creencias que en aquellas que recogí de mis educadores y que me fueron trasmitidas más desde sus miedos y limitaciones que desde su deseo de educarme y hacer de mí una mejor persona. Con esto no los critico, pues sé que hicieron lo mejor que sabían hacer con el conocimiento que tenían, y posiblemente yo esté a la vez implantando a mis nietos limitaciones de las que no soy consciente pensando que estoy haciendo lo mejor, quién sabe, sólo el tiempo lo dirá, de la misma manera que se lo dijo a mi madre, que su manera nada coercitiva de educarme fue la única y mejor escuela que pude haber tenido y que si en mis manos hubiera estado elegir mi educación habría pedido la de ser educada por la primaria e instintiva sabiduría de mi madre, en casa, sin tener que sentarme a calentar obligatoriamente un pupitre en la escuela primaria. De hecho el año que más disfruté de mi educación básica fue el año que mi madre me llevó a su salón de clases y estudié con ella, a donde no fui más admitida porque la creencia de que las niñas no podíamos estudiar en el mismo salón de los varones me lo impidió.
Con todo y esto mi madre y yo fuimos unas desobedientes civiles que nos atrevimos a nadar en contra de la corriente en tiempos donde el caudal no seguía el cauce del río, sino el cauce de las creencias colectivas.




martes, 15 de abril de 2014

Mas de un año en video de mis nietos.



Nada me gustaría más que poder escribir a diario un resumen de lo que son estos días, que considero han sido de los más felices de mi vida, pudiendo cuidar de ustedes, viéndolos crecer, descubrir de nuevo el mundo a través de sus ojos, el lenguaje, la vida, la gente, el amor y la inocencia, siendo testigo de sus nuevos logros de cómo se van adentrando en este mundo y posesionándose de esta maravillosa experiencia humana. Seguro que si me lo propongo lo logro...

 Ver como Thomasito ha crecido en todo el sentido de la palabra de una manera mágica, de una semana a la otra, sin previo aviso estaba hablando y vocalizando tan bien que nos parece mentiras. La otra noche tu hermana, con quien ya compartes habitación despertó en medio de la noche gritando y asustada porque según ella en la habitación había brujas y monstruos y tú te levantaste estregándote tus ojitos viniste hasta el borde de la cama de tu hermana, donde yo estaba tranquilizándola y me dijiste "abuelita las brujas no existen"
La característica que más te destaca es tu amorosidad, eres el niño más amoroso que he conocido me dices que me amas aproximadamente cuatro veces en una hora, y sueles decirle esos mismos te amos a cualquier persona que conoces, estas lleno de amor, de eso no nos cabe la menor duda, tu hermana en cambio es más rectada al respecto, ella derrocha muchos te amos con nosotros los de la casa, pero con los de la calle no.
He recopilado algunas fotos del año 2013 y algunos videos  para ver la evolución física que han tenido y con todo ese material hice un video grande musicalizado con la canción "let it go" de Frozen, la película favorita de Thomasito, aquí va.

Por cierto Sammy no tiene una película favorita en especial como Thomasito, pero le gusta mucho Bolt.